La alimentación del perro debe ser equilibrada, adaptada a las necesidades de cada raza. Es importante que la dieta sea constante, porque al sistema digestivo del perro le cuesta adaptarse a los cambios. Los cambios se realizan durante varios días combinando alimentos nuevos y viejos.
Porque la nutrición debe adaptarse a las necesidades fisiológicas: crecimiento, lactancia, obesidad, etc. la nutrición industrial nos es de gran ayuda. No es aconsejable llenar mucho el plato del perro con comida húmeda.
La comida del perro no debe durar más de media hora y el excedente debe desecharse o mantenerse fresco.
comida casera
El cuenco debe contener:
– un tercio de carne, pescado o pollo y dos tercios de alimentos a granel (arroz, verduras)
– la carne se puede dar fresca o cruda.
No le des al perro:
– alimentos fritos, verduras y cereales con almidón. El arroz debe estar bien hervido porque el almidón que contiene no es digerible en el intestino del perro, hay que eliminarlo hirviéndolo.
– Las salchichas, la carne y los huesos de cerdo y los huesos de ave no deben formar parte de la dieta del perro, independientemente de su edad.
La dieta del perro pequeño debe contener calcio y vitaminas, proteínas y grasas.
Para los cachorros grandes, el calcio es indispensable.
Se recomienda dar calcio preparado y dosificado.
Comida para perros – cuidados
La alimentación adecuada es fundamental para el cuidado de tu perro. Aquí tienes algunos consejos sobre cómo elegir la comida adecuada y cómo cuidar la alimentación de tu mascota:
1. Alimentación de calidad:
- Opta por alimentos de alta calidad que estén formulados específicamente para la edad, tamaño y nivel de actividad de tu perro. Busca marcas reconocidas y consulta con tu veterinario si tienes dudas.
2. Nutrientes esenciales:
- La comida debe contener proteínas de alta calidad, carbohidratos, grasas, vitaminas y minerales esenciales para una dieta equilibrada.
- Los perros son carnívoros, por lo que la proteína debe ser un componente importante en su dieta. La carne magra, el pollo o el pavo suelen ser buenas fuentes de proteína.
3. Evita alimentos perjudiciales:
- No des alimentos dañinos para los perros, como chocolate, uvas, cebolla, ajo, aguacate y alimentos con alto contenido de grasa o sal.
- Mantén a tu perro alejado de la comida para humanos y asegúrate de que no tenga acceso a la basura.
4. Control de porciones:
- Sigue las recomendaciones del fabricante o las pautas de tu veterinario para determinar la cantidad adecuada de comida para tu perro.
- No sobrealimentes a tu perro, ya que el sobrepeso puede llevar a problemas de salud.
5. Agua fresca:
- Asegúrate de que tu perro siempre tenga acceso a agua limpia y fresca. El agua es esencial para su salud y bienestar.
6. Horarios regulares:
- Establece horarios regulares de alimentación para tu perro. Esto ayuda a regular su sistema digestivo y a prevenir problemas gastrointestinales.
7. Cambios en la dieta:
- Si deseas cambiar la dieta de tu perro, hazlo gradualmente durante varios días para evitar problemas digestivos. Mezcla la nueva comida con la antigua en proporciones crecientes.
8. Suplementos:
- Consulta a tu veterinario antes de dar suplementos a tu perro. En general, una dieta equilibrada debe proporcionar todos los nutrientes necesarios.
9. Observa el peso:
- Mantén un peso saludable para tu perro, ya que el sobrepeso puede llevar a problemas de salud, como diabetes y enfermedades cardíacas.
10. Control de alergias y sensibilidades: – Si tu perro muestra signos de alergias alimentarias o sensibilidades, como picazón, vómitos o diarrea, consulta a tu veterinario para encontrar una dieta adecuada.
11. Atención médica: – Tu veterinario puede brindarte recomendaciones específicas sobre la alimentación de tu perro según sus necesidades de salud.
Recuerda que cada perro es diferente, y lo que funciona para uno puede no ser adecuado para otro. Siempre consulta con tu veterinario para obtener orientación personalizada sobre la alimentación de tu mascota y asegúrate de que su dieta esté adaptada a sus necesidades específicas.